9 motivos para optar por la energía solar de autoconsumo en una segunda residencia

Cada vez las personas buscan adquirir una segunda residencia como una forma de inversión o para disfrutar en vacaciones. Se estima que este sector ha crecido hasta un 18% solo en 2018 en España y la tendencia sigue aumentando.

Sin embargo, al momento de plantearte esta inversión es importante analizar los gastos extra que traerá a tu presupuesto tanto en hipotecas como pago de servicio. En este sentido, se ha estimado que los gastos fijos anuales por una segunda vivienda suelen oscilar los 1.800 euros.

Uno de estos gastos viene referido a la tarifa de la luz, un servicio que sueles utilizar solo temporalmente cuando acudes a tu segunda residencia. No obstante, igualmente te ves sometido a los frecuentes aumentos del coste del kilovatio.

Por tanto, puede ser interesante estudiar la opción de instalar paneles solares en tu segunda residencia a fin de generar energía de autoconsumo. Este tipo de energía se está volviendo cada vez más popular y rentable, debido principalmente a la disminución en los gastos de instalación.

La colocación de paneles solares para la obtención de energía fotovoltaica en tu segunda residencia, puede traerte grandes beneficios. Entre estos se pueden destacar los siguientes:

1. Los gastos de instalación se amortizan rápidamente

La tecnología de paneles solares ha venido disminuyendo de forma drástica en los últimos años, particularmente porque los costes de instalación son cada vez menores. Asimismo, la duración media de la instalación es de aproximadamente 25 años y por tanto la inversión realizada se recupera en un tiempo relativamente corto.

Se estima que actualmente los costes por instalar paneles solares para el autoconsumo en una residencia se encuentran entre los 4.000 a 6.000 euros. Además, los mismos se amortizan en aproximadamente 7 años asociado al ahorro en el consumo eléctrico.

2. Se reduce el pago de impuestos

En muchos lugares se fomenta el uso de la energía renovable de autoconsumo disminuyendo el pago de algunos impuestos. En España particularmente se ha venido estimulando el uso de la energía solar al eliminar el llamado “impuesto al sol” en 2018, el cual implicaba un cargo asociado a la generación producida.

Actualmente hay políticas que reducen el pago de impuesto en el IRPF (Impuesto sobre la Renta de Personas Físicas) y al IBI (Impuesto a Bienes Inmuebles). Igualmente, en muchas Comunidades Autónomas es posible acceder a subvenciones para la instalación de los paneles solares.

3. Puedes vender los excedentes de energía

Cuando instalas los paneles solares combinados con la energía convencional, los excedentes no consumidos los puedes utilizar para pagar la factura de la luz. En este caso, se tiene un sistema donde se utiliza durante algunos períodos energía de autoconsumo y en otros la proveniente de la red eléctrica.

En aquellos momentos en que se producen excedentes por autoconsumo, se pueden enviar a la red central. Posteriormente, lo producido por esta energía entregada al sistema se reduce de tu consumo eléctrico.

4. Se requiere poco mantenimiento

Los costes para mantener en funcionamiento los paneles solares son bastante bajos en comparación con otros tipos de energía renovable. El mantenimiento se debe realizar solo una vez al año y consiste en comprobar si los paneles están transformando y enviando correctamente la energía a la red de la vivienda.

5. Hay un incremento en el valor de la vivienda

Muchas personas compran una segunda residencia como una forma de inversión y al instalar un sistema de energía solar de autoconsumo, el valor agregado de la misma aumenta. Esto porque los potenciales compradores verán la ventaja del ahorro en el consumo de energía sin tener que hacer una inversión extra.

6. No se generan emisiones contaminantes

Si eres una persona preocupada por el medio ambiente, seguramente quieres reducir tu impacto sobre el planeta. Este tipo de energía no produce emisiones de CO₂, con lo que contribuyes a reducir el efecto invernadero.

Así, “al instalar energía solar de autoconsumo con una generación de 100 Kw, la reducción en las emisiones de CO₂ será de 2.000 toneladas en sus 25 años de vida útil” (fuente: https://solarplak.es/). Actualmente, el aumento en 42% del uso de las energías renovables ya ha logrado reducir en un 3,3% la emisión global de este gas de efecto invernadero.

7. Puedes optar por el autoconsumo aislado

En este caso se instalan paneles solares con baterías de almacenamiento. De esta forma te independizas de la red eléctrica convencional y utilizas la energía autogenerada y almacenada.

Esto puede ser muy conveniente en tu segunda residencia, porque es una vivienda que solo utilizas de forma ocasional. Así que lo acumulado, particularmente en el verano, es suficiente para cubrir el consumo interno.

8. Es de fácil instalación

Los paneles solares para proveer energía fotovoltaica se acoplan generalmente al tejado de la vivienda. Los mismos se incorporan al diseño de la vivienda a fin de que no rompan con su estética.

Este tipo de instalaciones debe ser hecha por un profesional, porque deben tomarse en cuenta factores como la dirección de instalación y conexiones internas. No obstante, no implica la realización de reformas importantes en la vivienda.

9. Se logra la autosuficiencia energética

Si instalas un sistema de autoconsumo aislado, no te verás afectados por las variaciones en el coste de la energía proveniente de la red eléctrica. Además, lograrás tener una vivienda autosostenible desde el punto de vista energético.